Capítulo 2

Hola chicas! Buenas noches^^ ¿cómo estáis? el finde llega a su fin y deseo que empecéis con todo la semana que entra! Me alegro tanto de que os haya gustado el primer capítulo.. la verdad que la novela es hermosa... Os dejo capítulo y ojalá os siga gustando^^ 

Mil gracias por leer y por sus hermosos comentarios aquí y en twitter! son unas genias! 

Nos estamos leyendo^^  Beso enorme! 

@SorayaMoralesTA

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Llegada la noche, Lali se había cambiado de ropa como 5 veces. Quería estar bien hermosa para la sorpresa que le tenía Peter preparada... 

Cuenta Lali: 

Este es el sexto vestido que me pruebo pero sé que este es el elegido. Es un vestido rojo con vuelo por las rodillas. Me lo regaló Rosita por mi último cumpleaños, es una genia cosiendo. Toda la ropa que tengo esta cosida por ella.

Rosita: Te ves hermosa Lali. -la abrazó- 

Lali: Muchas gracias Rosita. -le siguió el abrazo- 

Rosita: -se separó de repente- ese debe de ser el señor Juan Pedro. -se fue corriendo a abrir la puerta cuando escuchó el timbre- 

Cuenta Peter: 

Estaba nervioso, era una gran sorpresa la que tenía preparada para Lali, el amor de mi vida. La conocía hacía tanto y todavía la sigo amando mas cada día. Todos los días descubro algo nuevo sobre ella, algo diferente, algo que hace que la ame todavía mas si es posible. 

Toqué el timbre y pocos segundos me abrió Rosita, el ama de llaves, la segunda mamá de Lali. 

Peter: Buenas noches Rosita, -la saludó con un beso en la mejilla- 

Rosita: Buenas noches señor Juan Pedro. -sonrió, cerrando la puerta a las espaldas de Peter- 

Peter: Ay Rosita, ¿cuantas veces te dije que me llames Peter? no soy tan viejo para esas formalidades... 

Rosita: Perdóneme Señ... -Peter rió- Peter. 

Peter: Así mejor y lo último, nada de usted. Tutéame por favor. 

Rosita sonrió y se alejó en busca de Lali. Mientras aproveché y fui a visitar a Eugenio, el abuelo de Lali. Su segundo Papá. 

Eugenio: Hola Peter, ¿Cómo te va? -me abrazó, es como un abuelo para mí también- 

Peter: Muy bien Eugenio, y ¿usted? -yo a el si lo trataba como usted, es el abuelo de mi novia y es un hombre muy noble que se merece todo mi respeto- 

Eugenio: Todo bien hijo -también me llamaba hijo igual que llamaba hija a Lali. Es una linda costumbre- ¿El trabajo como va? he oído que está cayendo el mercado de la fruta, espero que no sea verdad. Tu familia lleva generaciones con esa empresa, han dejado media vida en llevarla hasta lo mas alto y dejarla como está ahora. -Eugenio tenía muy buen ojo para los negocios y con mi familia se lleva bárbaro, todos en el pueblo lo aman-

Peter: No se preocupe Eugenio, el negocio esta de lo mejor, estamos alcanzando cifras inigualables, las mas altas que ha tenido la empresa en todos los años de recorrido que lleva. -Eugenio puso cara de alivio-. 

Rosita: Peter, en seguida está aquí Lali. 

Peter: Gracias Rosita. -le dediqué una amable sonrisa- 

Estuve hablando por unos minutos mas con el abuelo de mi novia hasta que llegó ella. Tan hermosa como siempre, pero esta noche tenía algo que no era capaz de descubrir. 

Era tan natural, con su vestido rojo de tirantes, sus chatitas para ir mas cómoda, su rostro sin nada de maquillaje y su pelo con ondas naturales. Me encanta Lali. Es una mujer única, sé que nunca voy a encontrar a ninguna mujer como ella, por eso no puedo dejarla escapar. 

Peter: Estas hermosa La... -dije acercándome y dejándole un tierno y húmedo beso en sus labios- 

Lali: Tú también Peter. -respondió a mi beso recibiéndolo con sus suaves labios- 

Cuenta Lali: 

Peter me podía de verdad, iba con unos pantalones de traje negros, una camisa blanca con los primeros botones desabrochados y una chaqueta negra de la misma tela que los pantalones. Había dejado sus botas de trabajar y las había cambiado por zapatos de vestir. Estaba hermoso. Además tenía ese olor tan varonil que atraía a cualquier mujer. 

Por esa parte no tengo problema alguno. Soy una chica muy inocente, de buena parezco tonta me suelen decir, pero si hay algo de lo que estoy completamente segura y nadie me va a cambiar esa idea es de que Peter me ama tanto como yo lo amo a el y nunca se iría con otra chica. Por eso cero celos por su parte. Hay alguna que otra mujer en el pueblo que lo mira demasiado y se nota que esta enamoradísima de Peter, Natalie se llama. En un tiempo fuimos amigas, pero ella cambió mucho su personalidad y ya no tenemos relación alguna. 

Peter: ¿vamos? -me preguntó con esa sonrisa de oreja a oreja que tanto lo caracteriza- 

Eugenio: -contesto el abuelito por mi parte- Vayan chicos, y disfruten que la noche es joven. Divertiros y cuidaros -ese cuidaros fue con segundas y lo fulminé con mi mirada- 

Peter: La voy a cuidar bien Eugenio. 

Eugenio: De eso no tengo duda ninguna.  

Sin yo poder decir ninguna palabra entre los dos hombres Peter me cogió de la cintura y me sacó de la casa. Me abrió caballerosamente la puerta de su coche y me ayudó a subir. Amaba que Peter tuviera esos detalles tan caballerosos. 

Subió el también al auto y antes de arrancar cogió mi nuca y se acercó hasta mis labios para ahora darme un beso completamente pasional. Nuestras lenguas se entrelazaron y jugaron entre ellas mientras nuestros labios no dejaban de acariciarse mutuamente. Al finalizar el beso mordió mi labio. 

Lali: Como toda la noche sea a sí me va a encantar... -sonreí- 

Peter: Esto no a hecho nada mas que empezar mi amor. -me acarició la mejilla izquierda y después se dispuso a poner en marcha el coche-.

Lali: ¿Dónde me vas a llevar mi amor? 

Peter: -ya estábamos de camino, me miró sonriente- No cuela La, te dije que es sorpresa... 

Lali: Bueno. Tenía que intentarlo. -me recosté en el asiento y me dedique a mirar por la ventanilla- 

Llevabamos 20 minutos o así de viaje cuando Peter paró de repente y me asusté. 

Lali: ¿por qué has parado? -lo miré- ¿la sorpresa no será aquí en medio del bosque no? 

Peter: -rió- no tontita, la sorpresa está dentro el bosque. Solo quiero vendarte los ojos para que sea totalmente sorpresa... 

Lali: Ay no... sabes que no me gusta nada que me tapen los ojos.. -Peter se puso detrás mio para vendarme los ojos-. 

Peter: ¿Confías en mi? -asentí- Entonces coge mi mano y vamos mi amor. 

Peter me cogió mi mano y caminamos cinco minutos mas o menos adentrándonos en el bosque. Iba súper asustada, sobre todo porque era de noche y estábamos en el bosque. Peter se había vuelto loco... 

Cuando llegamos Peter me abrazó por detrás y apartando mi larga melena del cuello me dejó tiernos besos. 

Lali: ¿Llegamos? -reí levemente por las cosquillas que me producían sus besos- 

Peter: Llegamos. -Me quitó la venda y me quedé boquiabierta- ¿Te gusta?

No pude decir nada, me quedé completamente muda.